Hay temor al ebola y Brasil refuerza el control sanitario en la frontera

El sistema de salud del Estado Paraná, Brasil, reforzó desde la semana pasada su sistema de vigilancia de salud en la ciudad de Foz de Yguazú, a fin de controlar eventualmente ingreso del virus del ebola en esta zona de frontera con Paraguay y Argentina. Hay todo un protocolo a seguir y la notificaciones de casos sospechosos es automático en centros médicos públicos y privados.

Por tratarse de una región eminentemente turística, la circulación constante  de turistas extranjeros, aumentan el riesgo de surgimiento de casos importados de la enfermedad en la región. Para identificar posibles situaciones de riesgo, la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) y las secretarias estadual y municipal de Salud, reforzaron el acompañamiento de pacientes con síntomas de la enfermedad. El Hospital Municipal de Foz, es el centro de referencia para el atendimientos de los casos en la región.

Al inicio del mes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) decretó emergencia de salud pública de alcance mundial contra la epidemia del virus del ebola, que afecta al norte de África. En este contexto, los profesionales de Salud de Foz, participaron de capacitación sobre los procedimientos necesarios en casos sospechosos. La acción es promovida coordinada  por la Novena Región de Salud.

“Las medidas en verdad, consiste en verificar posibles pacientes que vengan de África, principalmente de aquellos países que tienen la enfermedad y que puedan tener síntomas característicos del ebola. Teniendo los síntomas, hay un protocolo que a seguir para atender esos pacientes, inclusive está definido cuales son los hospitales de referencia”, explica la superintendente estadual de Vigilancia en Salud Sezifredo Paz, en declaraciones reproducidas en el diario A Gazeta de Foz de Yguazú.

CONTROL.  En la ciudad Foz de Yguazú, la ANVISA viene realizando el monitoreamiento de personas que vienen de los países de riesgo.  El trabajo se concentra en el aeropuerto internacional. “Consideramos los locales de donde vienen los extranjeros. Por ser una zona de frontera,  van y vienen  muchas personas de otros países. Es una preocupación nada más, no llega a ser un alerta máxima. Estamos cumpliendo lo que  la Organización Mundial de la Salud recomienda en el sentido de reforzar la vigilancia”, explica Paz.

El funcionario de salud señala que todo paciente que presente fiebre alta y síntomas de hemorragia, hasta 21 días después de retornar de uno de los cuatros países africanos afectados, será tratado como caso sospechoso de la enfermedad. Ese plazo fue estipulado porque el paciente puede manifestar síntomas hasta tres semana después de ser infectado como el virus aclara.

La transmisión solo ocurre después de la manifestación de los síntomas. La enfermedad no tiene cura comprobada, los tratamientos usados actualmente apenas reducen los síntomas. El acompañamiento es realizado por todos los hospitales públicos y privados.  Se está realizando un monitoreamiento, se procedió a la divulgación, en los hospitales, de los  procedimientos a seguir en casos sospechosos.  La  notificación es obligatoria e inmediata.

Ante casos  de sospecha, el material biológico para examen será colectado y llevado al Instituto Evandro Chagás, en el Estado de Pará. “Es todo un sistema de vigilancia que está siendo implementado con relación a esa enfermedad”, refiere Paz.

DESCARTADOS. En el Estado Paraná, dos casos sospechosos de ebola fueron descartados la semana pasada. La Secretaría Estadual de Salud identificó los pacientes en Londrina, localidad ubicada al norte del Estado. Se trata de una mujer de 46 años, que vino de Angola y un hombre de 61 años, que vino de Togo, ambos de África, que presentaron síntomas semejantes a los de la enfermedad, pero fueron diagnosticado con cardiopatía y malaria, respectivamente.

De acuerdo con la superintendente Paz, el sistema de prevención  y control contra la enfermedad adoptado en Brasil busca evitar la aparición de casos del ébola. “Nosotros trabajamos con la hipótesis de eso puede ocurrir. Nosotros tenemos un sistema más adecuado, las condiciones sanitarias nuestra es diferente. Entonces, podremos hasta tener casos importados, no estamos libre de eso, pero no tendremos con seguridad la situación que están vivienda en África”, asegura.